Mmm a ver... Originalmente vi Tres Metros Sobre el Cielo pensando raramente que sería de acción, nunca imaginé que sería una historia romántica... no, me quedé corta...romantiquísima!
Historias como la de Tres Metros Sobre El Cielo me recuerdan una ley del cine que es básica: Se puede contar la más vieja de todas las historias... si la manera en que se cuenta es buena, novedosa y diferente, simple y sencillamente será un éxito. Acá tenemos todos los ingredientes: un actor divino hecho un bombón hermoso: Mario Casas, una actríz que cumple y una historia que tiene todo para pegar. Amor, motos, dinero, emoción, humor.
Sonará super extraño que compare todo esto con lo que voy a contar a continuación, pero ya explicaré el porqué de mi asociación de ideas: En una ocasión platicaba con un tío respecto a la diferencia de los medicamentos genéricos con los de patente y me dijo que simplemente era la calidad de los ingredientes que se utilizaban, las certificaciones de los proveedores y la garantía que te ofrecía una empresa con años de experiencia como respaldo. Ok, ahora a lo que voy con esto es que TMSC tiene una manufactura de mucha calidad, es decir, utilizó ingredientes de calidad a nivel guión, creación de personajes,dirección de cámaras y reparto (Que tire la primera piedra quien me diga que Mario Casas no es una cosa hermosa de otro mundo). No niego que es una apuesta segurísima utilizar unos personajes tan estereotipados (el guapo temerario, la niña bien, la amiga rebelde, etc.) pero creo que fue todo de una manera muy acertada. No es la novedad, no es nada super original, simplemente es algo seguro... tiene garantía... cumple... entretiene bien... y sobre todo remonta a todos aquellos cínicos al tiempo en el que teníamos (al carajo, me incluyo) una fé ciega en el amor eterno y la media naranja. Snif Snif....
Me aguantaré el acento español y veré la segunda parte en estos días.
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